“Olivia Trujillo: La Diseñadora que Viste a la Primera Presidenta de México y Está Revolucionando la Moda Política en 2025”
En el mundo de la moda, hay historias que trascienden el glamour y se convierten en símbolos de talento, dedicación y pasión. Una de esas historias es la de Olivia Trujillo Cortez, la diseñadora que, desde su taller en Tlalpan, crea los vestidos y trajes de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, la primera mujer en ocupar este cargo en la historia del país.
Desde su primer vestido para la toma de protesta de Sheinbaum, hasta los trajes que la mandataria usó para iniciar su campaña electoral y más recientemente para eventos internacionales, Trujillo se ha convertido en la creadora detrás de la imagen de una de las figuras más influyentes del país. Pero, ¿cómo llegó una talentosa diseñadora, que comenzó creando ropa para muñecas a los 13 años, a vestir a la primera presidenta de México?

El Inicio de un Sueño
El camino de Olivia hacia el mundo de la alta costura comenzó, como muchas grandes historias, de manera humilde. Criada en un hogar donde su madre le transmitió la pasión por la moda, Olivia comenzó a diseñar y confeccionar a una edad temprana. A los 13 años ya tenía la habilidad para cortar y crear piezas únicas, y al poco tiempo comenzó a formar una base de clientas que la recomendaron de boca en boca. En noviembre de 2022, su talento llegó a oídos del equipo de Claudia Sheinbaum, quien se enamoró de sus trajes y la eligió para diseñar su vestuario oficial.
“Es un honor muy grande ser yo quien le diseñe sus vestidos”, nos comenta Olivia con orgullo. Y es que, a lo largo de estos años, la diseñadora ha logrado una conexión única con la presidenta, entendiendo perfectamente sus gustos, su figura y cómo hacerla lucir mejor.

De los Primeros Trajes a los Vestidos de Alta Costura
Uno de los momentos más destacados de la relación entre Olivia y Claudia Sheinbaum fue el diseño del vestido con el que la presidenta se casó en 2023. Pero además de este vestido, Trujillo ha sido la responsable de otros momentos icónicos en la carrera de Sheinbaum, como el vestido que usó en el tercer debate presidencial, que fue confeccionado a última hora: “Empecé a las 8 de la noche y lo terminé a las 4 de la mañana”, relata la diseñadora.
El trabajo de Olivia no se limita solo a confeccionar ropa: ella se dedica completamente a conocer el contexto de cada evento al que asistirá la presidenta. Cada diseño tiene un propósito específico y un simbolismo único. Por ejemplo, cada vez que Sheinbaum visita un estado de la República Mexicana, Olivia utiliza textiles representativos de la región, como los bordados de Yucatán o Puebla, creando una sinergia entre la cultura local y el estilo de la mandataria.
La Gran Responsabilidad de Vestir a la Presidenta
Vestir a la presidenta no solo es un honor, sino también una gran responsabilidad. Olivia Trujillo es consciente de que cada prenda que confecciona no solo refleja su habilidad como diseñadora, sino también el estilo y la imagen de una figura política de gran trascendencia. Y aunque muchos de sus diseños son fruto de las ideas y sugerencias del equipo de Sheinbaum, muchos otros son completamente originales y concebidos por ella misma.
“Yo le hago todos los vestidos que quiera, todos los trajes que quiera, con mucho gusto. Siempre que ella quiera un vestido, yo se lo voy a hacer. Les aseguro que serán apropiados, elegantes y hermosos”, afirma Olivia con determinación.
El Futuro de la Moda Política en México
El trabajo de Olivia Trujillo es mucho más que una simple confección de vestidos. Ella ha logrado darle un toque único a la moda política, creando una imagen visualmente poderosa para Claudia Sheinbaum, quien se ha convertido en un referente de estilo y empoderamiento. Su visión se ha materializado no solo en los trajes que la presidenta usa en actos oficiales, sino también en la forma en que la moda puede ser una herramienta de comunicación y representación de valores políticos.
Olivia Trujillo es la diseñadora que está marcando una diferencia en la moda política en México. A través de su habilidad, su pasión y su compromiso, ha logrado crear un estilo único para la primera presidenta de México, una mujer que, además de romper barreras, está redefiniendo el papel de la moda en la política. El trabajo de Trujillo es la prueba de que la moda puede ser un acto de empoderamiento, cultura y, por supuesto, elegancia.
Si algo es seguro es que la historia de Olivia Trujillo y Claudia Sheinbaum continuará siendo una inspiración para las futuras generaciones de diseñadores y líderes políticos, quienes comprenderán que la moda no es solo vestimenta, sino una poderosa herramienta para transmitir un mensaje al mundo
