Cuando creíamos que la familia del campeón Saúl “Canelo” Álvarez solo repartía knockouts en el ring, ahora también se ve envuelta en una pelea legal. El cantante Luis R. Conriquez denunció que compró un Rolls Royce a la agencia Álvarez Exotics —propiedad del hermano del boxeador— y resultó ser robado.
El escándalo creció tanto que la Fiscalía de Jalisco cateó las oficinas del negocio, dejando claro que esto va más allá de una simple confusión administrativa. El auto, valuado en millones, estaba reportado como robado desde 2022.
Hasta el momento, Canelo no ha dado declaraciones, pero su equipo legal ya está tomando cartas en el asunto. Luis R., por su parte, publicó en redes: “Uno trabaja duro para que lo engañen así”.
💡 ¿Se tambalea la reputación del ídolo tapatío por culpa de su círculo cercano?