Rosalía ha adoptado un ritual diario que mezcla journaling, meditación zen y algo de ikebana (el arte floral japonés). En sus palabras, es su fórmula para mantenerse enfocada y creativa, especialmente en medio del caos de la fama.
Además, ha dejado el café por infusiones de adaptógenos y se ha sumado al movimiento slow mornings: nada de celular hasta pasadas las 10 am. Esta rutina le ha ayudado a componer con más claridad, descansar mejor y mantenerse en paz. Un mood saludable, creativo y muy ella.