By Janice Combs, madre de Sean “Diddy” Combs, ha realizado una declaración en representación de la familia Combs en medio de las persistentes acusaciones de abuso sexual en contra del magnate de la música.
Combs fue acusado por fiscales federales a mediados de septiembre de delitos relacionados con crimen organizado y tráfico sexual, y se le negó la libertad bajo fianza. En una declaración emitida el domingo (6 de octubre) a través de su abogada Natalie G. Figgers, y obtenida por The Hollywood Reporter, la madre de Combs expresó que Diddy no es culpable de las acusaciones en su contra: “Mi hijo no es el monstruo que han retratado y merece la oportunidad de contar su versión”.
“Es desgarrador ver a mi hijo juzgado no por la verdad, sino por una narrativa construida a partir de mentiras”, afirma en su declaración, que se produce cinco días después de que se revelara que Diddy enfrentará demandas de 120 acusadores adicionales por presuntos incidentes que datan de 1991. “Presenciar lo que parece ser un linchamiento público de mi hijo antes de que haya tenido la oportunidad de demostrar su inocencia es un dolor demasiado profundo para expresar con palabras. Como cualquier ser humano, mi hijo merece tener su día en la corte para finalmente compartir su versión y demostrar su inocencia”.
Los documentos de la acusación revelados el 17 de septiembre indicaban: “Durante décadas, Sean Combs… abusó, amenazó y coaccionó a mujeres y personas a su alrededor para satisfacer sus deseos sexuales, proteger su reputación y encubrir su comportamiento. Para lograrlo, Combs se apoyó en los empleados, recursos e influencia de su vasto imperio empresarial”.
Si es declarado culpable de todos los cargos, Combs podría enfrentar una condena mínima de 15 años de prisión y un máximo de cadena perpetua.
El domingo, su madre, Janice Combs, expresó: “No estoy aquí para presentar a mi hijo como alguien perfecto, porque no lo es. Ha cometido errores, como todos nosotros”. También hizo alusión a la demanda que Combs resolvió el año pasado con su exnovia, Cassie Ventura, quien lo acusó de abuso y violación. Aunque Combs negó las acusaciones, cuando salió a la luz un video de él agrediéndola en un hotel, ofreció una disculpa.
Janice continuó: “Es posible que mi hijo no haya sido completamente honesto acerca de ciertos temas, como negar que alguna vez fue violento con una exnovia, cuando la evidencia del hotel demostró lo contrario. A veces, la verdad y la mentira están tan entrelazadas que es aterrador admitir partes de la historia, especialmente cuando esa verdad es difícil de aceptar. Creo que el equipo legal de mi hijo decidió resolver la demanda en lugar de seguir peleándola, pero esa decisión fue utilizada en su contra, interpretándola como una admisión de culpabilidad por parte del gobierno federal”.
Janice Combs aclaró que, aunque su hijo no ha sido completamente honesto sobre algunos aspectos de su vida, esto no lo convierte en culpable de las “repulsivas acusaciones y los graves cargos” que se han presentado en su contra. Subrayó que los errores cometidos por Combs en el pasado no justifican las acusaciones actuales, reafirmando su convicción de que él merece una oportunidad justa para defenderse y contar su versión de los hechos.
Janice Combs expresó su profundo dolor al ver cómo su hijo ha sido juzgado injustamente, comparando su situación con la de personas que han sido condenadas por no ajustarse a la imagen de una “buena persona” según los estándares sociales. Señaló que, a menudo, quienes son exonerados más tarde fueron privados de su libertad no por ser culpables, sino por sus errores pasados.
Añadió que es angustiante ver cómo el mundo se ha vuelto contra Diddy sin darle la oportunidad de contar su versión, subrayando que las acusaciones están motivadas por intereses económicos y no por un deseo real de justicia. Además, lamentó que las falsas acusaciones obstaculicen el camino de las verdaderas víctimas de agresión sexual. Por último, criticó al gobierno federal por basarse en estas mentiras para llevar a cabo el proceso legal, lo que ha sido una carga insoportable para su familia.
