El Teatro Colosseum del Caesars Palace en Las Vegas vivió un momento histórico este fin de semana, cuando dos grandes estrellas de la música, Adele (36 años, Londres) y Céline Dion (56 años, Canadá), se reencontraron. Durante uno de los conciertos de Adele en la ciudad, mientras interpretaba When We Were Young, la cantante británica vio a Dion entre el público y, emocionada, se acercó para abrazarla, generando gran conmoción entre los presentes. En medio de la emoción, Adele pidió al público que la ayudara a continuar la canción, y Dion, acompañada de sus hijos Nelson y Eddy Angéli, de 14 años, con lágrimas en los ojos, le dio un beso en la mano.
Céline Dion, retirada desde 2022 debido a una rara enfermedad neurológica llamada síndrome de la persona rígida (SPR), que afecta su movilidad y voz, reapareció en los escenarios en julio de 2024, en la gala de apertura de los Juegos Olímpicos de París, donde interpretó Hymne à l’amour desde la Torre Eiffel. A pesar de su enfermedad, Dion sigue siendo una figura inspiradora, documentando su lucha en el documental I Am: Celine Dion, estrenado en junio de 2024, en el que se muestra un episodio particularmente impactante de su padecimiento.
Dion, al igual que Adele, tuvo una larga residencia en Las Vegas, donde realizó 1.141 actuaciones ante más de 4,5 millones de personas. De hecho, el Teatro Colosseum se construyó en 2003 para albergar sus conciertos. Ambas artistas se conocieron por primera vez en 2018, y desde entonces, Adele ha expresado su admiración por Dion en varias ocasiones. En su cuenta de Instagram, tras asistir a uno de los conciertos de Dion, Adele la describió como una “reina” y destacó el espectáculo como uno de los momentos más importantes de su vida.
La admiración de Adele por Dion también quedó plasmada en una entrevista para Vogue en 2021, cuando reveló que su posesión más preciada es un pedazo de chicle de Dion, enmarcado y regalado por el presentador James Corden.
El reciente concierto de Adele en el que se reencontraron ambas artistas forma parte de la última fase de su residencia en Las Vegas, Weekends with Adele, que concluirá el 23 de noviembre de 2024. Adele, quien anunció en agosto que se tomará un descanso de la música, también reveló que sufre de pérdida parcial de audición debido a una infección bacteriana en el oído, lo que ha influido en su decisión de alejarse temporalmente de los escenarios.