By Este snack saludable no solo evita el tentador picoteo habitual, sino que también es una excelente fuente de fibra y energía. Ayuda a reducir el colesterol y controlar los niveles de azúcar en sangre. Además, fortalece el sistema inmunológico, mejora el tránsito intestinal y aporta una variedad de vitaminas, minerales y proteínas como la vitamina E, ácido fólico, tiamina, magnesio, fósforo, cobre, zinc y selenio.
La granola también es conocida por su capacidad saciante, lo que ayuda a reducir la sensación de hambre por las mañanas y a mantener el consumo calórico bajo control al evitar los snacks innecesarios. Es especialmente valorada en dietas deportivas por su capacidad de aumentar la energía, siendo ideal tanto para el desayuno como para consumir antes o después de la actividad física.
En el contexto de la pérdida de peso, la granola puede ser un sustituto inteligente de opciones más dulces, gracias a su capacidad saciante y a las grasas saludables que proporciona, las cuales se convierten en energía beneficiosa para el organismo.
Además, su consumo adecuado de frutos secos ricos en ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados es crucial para el funcionamiento cerebral y beneficioso para controlar la presión arterial y la diabetes.
Una porción diaria, como una taza de granola, puede aportar hasta 4 gramos de fibra, promoviendo digestiones más rápidas y ofreciendo un amplio espectro de vitaminas y minerales que mantienen las defensas altas y combaten la fatiga.
