La inteligencia artificial ha entrado de lleno en la industria musical. Herramientas como Suno, Udio y plataformas experimentales están generando canciones desde cero, incluso imitando estilos y voces de artistas reales. Esto ha generado debates éticos: ¿es arte si lo crea una máquina?
Figuras como Harvey Mason Jr. apoyan legislaciones como el “No Fakes Act” para proteger derechos de autor y evitar deepfakes no autorizados. Mientras tanto, otros artistas como Imogen Heap experimentan con IA para crear experiencias musicales interactivas, mezclando creatividad humana y tecnología de manera colaborativa
