By La charrería ha sido un pilar fundamental en la historia de la familia Aguilar, fusionándose de manera única con su legado musical. Pepe Aguilar, quien desde joven mostró una profunda admiración por esta disciplina, ha logrado mantener viva esta tradición dentro de su carrera artística. Para él, la charrería no es solo una pasión, sino una forma de vida que ha acompañado a su familia por generaciones. Su conexión con el mundo ecuestre no es reciente, ya que, además de su faceta como cantante, ha demostrado ser un gran empresario en este ámbito, destacándose con la administración de su rancho El Soyate, un lugar emblemático para la práctica de esta disciplina.
Recientemente, Pepe Aguilar dio un paso significativo al adquirir el equipo de charrería Los Tres Potrillos, una de las escuadras más prestigiosas de México, fundada en 1984 por Vicente Fernández, quien junto a sus hijos Gerardo y Alejandro Fernández, consolidó el equipo como uno de los más destacados en el mundo de la charrería. La adquisición de Los Tres Potrillos por parte de Pepe Aguilar se presentó como una sorpresa para muchos, ya que la noticia desató una gran expectación en el ámbito ecuestre, especialmente porque se pensaba que las dos grandes familias, los Fernández y los Aguilar, formarían una alianza estratégica para fortalecer sus equipos. Sin embargo, en un giro inesperado, fue Pepe quien asumió la responsabilidad de liderar la escuadra, la cual será integrada a su propio equipo, El Soyate, con el objetivo de continuar con el legado de su pasión por la charrería.
El propio Pepe Aguilar, visiblemente emocionado por este nuevo capítulo, comentó en una entrevista que, aunque todavía no podía creer lo sucedido, se sentía agradecido y afortunado de poder continuar con el legado de la charrería. En palabras de Pepe, la adquisición de Los Tres Potrillos se dio en el momento preciso, como si “los planetas se alinearan” para que todo encajara de manera perfecta. Además, resaltó que la charrería ha sido parte de su vida desde antes de ser cantante, algo que lo convierte en un charro de cuna. “Primero fui charro y luego cantante”, señaló, reafirmando su amor por esta tradición que ha sido tan importante en su familia.
Aunque los detalles del acuerdo no fueron revelados, la transacción no solo representa una expansión para Pepe Aguilar como empresario ecuestre, sino también una forma de seguir impulsando el desarrollo de la charrería en México. El equipo de Los Tres Potrillos, con su rica historia y su legado, ahora formará parte de El Soyate, lo que marca el inicio de una nueva etapa para la familia Aguilar en este deporte.
Este giro también marcó un adiós significativo para los Fernández, quienes durante décadas han sido una de las familias más influyentes en la charrería mexicana. Gerardo Fernández, quien estaba al frente del equipo, despidió a Los Tres Potrillos con un mensaje en redes sociales que conmovió a sus seguidores: “Con esa cala me despido de la Federación Mexicana de Charrería. Atte. Gerardo Fernández Abarca”. Esta despedida, que tuvo lugar en el reciente Campeonato Nacional, simboliza no solo el fin de una era para los Fernández, sino también el cierre de un ciclo en el que Los Tres Potrillos fueron una referencia indiscutible en el mundo de la charrería.
Vicente Fernández Jr., hijo del icónico Vicente Fernández, explicó en una entrevista que la decisión de vender el equipo fue estratégica. Aseguró que algunos miembros del equipo de Los Tres Potrillos continuarán su carrera en el equipo de Pepe Aguilar, lo que demuestra que, a pesar del cambio de manos, la esencia de la escuadra seguirá viva. Para los Aguilar, este nuevo reto no solo es un orgullo, sino también una oportunidad para seguir creciendo y demostrando su pasión por la charrería.
Con esta adquisición, Pepe Aguilar no solo expande su influencia dentro de la música y el entretenimiento, sino que también reafirma su compromiso con una de las tradiciones más representativas de México. Los Tres Potrillos, bajo el liderazgo de los Aguilar, promete seguir siendo un referente en el mundo de la charrería, y su inclusión en El Soyate augura una nueva etapa llena de éxitos y de celebraciones para la familia Aguilar y para todos los amantes de este deporte.
