By Bienvenid@ al mundo del amor 4.0.
Antes, el peor miedo era que no te llamaran después de una cita. Ahora, es que te dejen en “visto”, que vean tus historias sin responderte nunca más, o que te manden un “¿cómo estás?” justo cuando ya los superaste. ¿Te suena? Tranquila, no estás loca, estás saliendo en 2025.
¿Qué es todo esto y por qué todos estamos hablando en idioma de fantasmas?
Las apps de citas han cambiado las reglas del juego. Ya no se trata solo de química, sino de estrategia, ego y gestión de atención. Aquí te va el diccionario emocional básico para no morir en el intento:
GHOSTING
Desaparecer sin explicación, estilo Houdini emocional.
Lo clásico. Todo iba bien, pero un día dejó de responder. No murió, no lo atropelló un tren, simplemente dejó de contestar… para siempre.
ORBITING
Te dejó, pero sigue viendo tus historias, dándole like a tus reels, y apareciendo justo cuando estás por olvidarlo.
Como si su algoritmo tuviera radar emocional. No te habla, pero no se va. Básicamente un satélite emocional sin utilidad.
BREADCRUMBING
Te manda migajas de atención para que no te vayas, pero nunca concreta nada.
“¿Y si salimos esta semana?”… pero nunca propone día ni hora. Solo mantiene la ilusión viva para alimentar su ego.
¿Por qué lo hacen (y por qué caemos)?
El amor digital está plagado de validación instantánea. Ghostean porque enfrentarse a una conversación incómoda les da flojera. Orbean porque quieren seguir en tu radar sin comprometerse. Y breadcrumbing es solo el ego hablando por WhatsApp.
Cómo proteger tu paz emocional:
- Ten tu red flag radar activo. Si te suena raro… es porque es raro.
- No idealices. Una conexión no es promesa de futuro.
- Establece límites digitales. Mutea, bloquea o simplemente ignora.
- Ten tu squad emocional. Habla con tus amigas, no con su ghost.
Cierre con statement:
El amor moderno tiene nuevos códigos, pero tu valor sigue siendo el mismo. No eres “demasiado intensa” por querer claridad. Eres demasiado brillante para andar mendigando migajas. Aprende el idioma del dating digital… pero no pierdas tu idioma emocional.
