Hubo un tiempo en que las baladas tristes eran la única forma de procesar una ruptura. Pero 2023 y 2024 trajeron otra propuesta: el despecho con ritmo, y las líderes del movimiento son dos diosas latinas que no necesitan presentación: Karol G y Shakira.

Primero fue Shakira con su sesión con Bizarrap, donde facturó cada lágrima con frases que se volvieron tatuajes digitales. Luego, Karol G con “TQG”, “Mientras Me Curo del Cora” y todo un disco que transformó el desamor en un grito de poder.
¿Qué tienen en común?
- No se esconden. Al contrario, usan su historia personal como catarsis colectiva.
- Empoderan a otras morras. Con sus letras nos recuerdan que está bien doler, pero también está bien seguir adelante bailando.
- Son vulnerables, pero jamás víctimas. Lloran, sí… pero con rimel intacto y ritmo en el cuerpo.
¿Y lo mejor? Nos enseñaron que el despecho no tiene que sonar triste, que también se puede sanar con beats, con amigas, con letras punzantes y con mucha, MUCHA actitud.